Fuentepina Selección (58.50€/Caja 6 Botellas), uno de los mejores vinos que encontrará en nuestra bodega, ha sido seleccionado por la Revista Club de Gourments, como el vino y la bodega del mes. Recordemos que presenta las siguientes características: Picota intenso con ribete granate. Compleja vía nasal marcada por recuerdos de fruta madura, ahumados, maderas aromáticas, cacao, pimienta negra, carbón, tierra húmeda y cueros. Sabroso, estructurado y fresco, sensaciones de ciruelas maduras, sándalo, clavo, incienso, tabaco, monte bajo, balsámicos… Persistente final marcado por aromas especiados y ahumados.

A continuación se muestra el artículo completo que han elaborado sobre este vino:

Los pilares sobre los que se apoya la bodega son la uva y la madera”, dice José Manuel Corrales, enólogo y director técnico de la bodega. “Para garantizar que la calidad del fruto sea la deseada, asesoramos a nuestros proveedores durante todo el año, especialmente a la hora de la vendimia, para que la uva se recoja en el punto óptimo de maduración”.  Otra de las bases de la empresa –prosigue Corrales– es el factor humano, “gente que en algunos casos lleva trabajando en Avelino Vegas desde la adolescencia; hombres y mujeres que se sienten parte de la bodega y de la familia. Y ese esfuerzo, esa ilusión, también se transmite a los vinos”.

La bodega Avelino Vegas, fundada en 1994, surgió de la unión de la familia Vegas (bodegueros desde 1959) con la Cooperativa Santísima Trinidad de Fuentespina, que aporta la uva de las 365 ha de sus socios. Actualmente está bajo la dirección de Fernando Vegas junto a sus hermanos Isabel y Avelino, mientras que Maribel García Vegas, directora de planificación, pertenece ya a la tercera generación a la que muy pronto se incorporarán nuevos miembros de la familia. El equipo se completa con el ingeniero de campo Antonio Cuesta y las enólogas auxiliares Pradi Rojo y Mariana Mitrasca.

Paisaje interior

Ubicada en la localidad de Fuentespina (Burgos) –a 2 km de Aranda de Duero–la bodega está dentro de la Denominación de Origen Ribera del Duero. Se trata de una bodega de buen tamaño, con instalaciones para elaborar alrededor de cuatro millones de litros. Dispone de 16 depósitos Ganimede (125.000 litros) y un parque de 3.750 barricas de roble francés (60%) y americano (40%) que se renuevan cada 5 años. Su diseño es el clásico de todas las cooperativas que se construyeron en los años 70, destacando su nave de almacenamiento de granel con una capacidad de un millón de litros.

Las reformas llevadas a cabo en los últimos años han supuesto modernizar la línea de embotellado, ampliar la nave de botellero –ahora con capacidad para un millón– y disponer de mayor espacio para la nave de crianzas. En la actualidad, y con un volumen de elaboración cercano a los tres millones de botellas, la bodega sigue manteniendo la originaria impronta familiar, “seguimos apostando por el trato cercano y directo con los clientes, a quienes ofrecemos un vino a la carta”, comenta Fernando Vegas.

Al aire libre

Disponen en total de 600 ha de superficie de viñedo de la variedad tinto fino (tempranillo). De los viñedos más viejos –plantados entre 1917 y 1945– se obtiene la uva con la que se elaboran los vinos de alta gama. Están situados en las laderas más altas de Fuentespina, Milagros y otros pueblos cercanos, sobre suelos arcillosos y arenosos en una zona cuya diferencia con otras situadas en los valles próximos es notable por el gran salto térmico entre el día y la noche durante los meses de verano, donde es habitual alcanzar los 35-37ºC a mediodía y descender hasta los 10-12ºC por la noche, efecto que favorece una maduración muy lenta de la uva y otorga una mayor mineralización a los vinos.

La vendimia, siempre manual, se lleva a cabo cuando el director técnico considera que el fruto está en su momento óptimo de maduración y la uva, que se recoge en cajas de 20 kilos, llega intacta a la bodega en menos de dos horas.

Novedades

“En los dos últimos años, el esfuerzo de la empresa ha sido el desarrollo de un cambio de gama en los vinos de Fuentespina”, dice José Manuel Corrales. “Hemos incorporado el Fuentespina 7, un vino muy fresco y afrutado con el punto de roble justo para disfrutar, y el Especial F, del que sólo hemos sacado 10.000 botellas.

Se trata de un vino elaborado con una selección de uva de los viñedos más antiguos de la Ribera del Duero y criado sin prisa, en robles europeos del Caúcaso, Alliers y Nevers. Además, tal como corresponde a su categoría, lo hemos vestido de gala, utilizando una réplica de las botellas originales de Borgoña sopladas en 1859 y lacrándolas a mano, tal como se hacía entonces.”

El vino del mes

“En Fuentespina conocemos el carácter del Club de Vinos Gourmets y su nivel de exigencia en calidad, por lo que decidimos elaborar este vino a partir de nuestras viñas viejas para aportar una mayor estructura. Después de una elaboración muy cuidada lo pusimos en alma de roble francés Allier, Nevers y Troncais y tras 16 meses en barrica, se embotelló para que afinara en botella durante otro año más”.

El resultado es este vino potente en boca, estructurado, con un paso elegante y un largo final. Se trata de una buena elección para despedir el verano y dar la bienvenida al otoño o bien conservarlo en buenas condiciones ya que se trata de un vino de guarda que irá mejorando en los próximos diez años.